¿Alguna vez has tenido la sensación de querer algo con todas tus fuerzas?

Porque a veces sin explicación alguna, ocurren cosas. Como la sensación de querer algo que apenas conoces, de sentir algo inexplicable en el estómago que no sabes de donde viene, ni por qué y tener la certeza de que nunca antes habías sentido algo similar. De creer que te estás volviendo loca porque no es normal tener esos sentimientos, la sensación de saber que nadie te entiende, nadie lo ve normal....ni tú misma.

Pero a veces, sin darnos cuenta ocurre. Ves a alguien y sientes que es la persona que está hecha para tí, que mejor va contigo, esa persona que todos los días tienes ganas de ver, que te encantaría poder acariciar, besar... poderle decir que te encantan esos oyuelos que se forman en su carita cuando te dedica una sonrisa...

Y sobre todo, lo que más te gustaría es que esa persona fuese la responsable de tu inmensa sonrisa al despertar cada día.

Porque a veces aunque los demás no entiendan el porqué te sientes así, no importa, la única persona que te gustaría que te entendiera es (ÉL) esa a la cual te gustaria poderle decír todas estas cosas y no tener que dejarlas plasmadas en un papel, para siempre.